Especialistas del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (Inti) y de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), visitaron a productores locales e iniciaron la aplicación del programa de “Buenas prácticas de manifacturas para bodegueros jujeños”, en el marco del fortalecimiento de la actividad por impulso del Ministerio de Desarrollo Económico y Producción.
“El objetivo de este programa es trabajar junto a los bodegueros que representan al sector, a dos elaboradores caseros y una destilería, en un programa de diseño e implementación de buenas prácticas que hacen a las bodegas”, manifestó el presidente del Consejo Consultivo de Vitivinicultura, Ezequiel Bellone.
Con ese fin, los técnicos visitaron las bodegas “Amanecer andino”, “Chalala”, “El Milagro”, “Dupont” y “El Perchel”, donde relevaron detalles para un primer diagnóstico. Para ello, contaron con el respaldo de la Dirección General de Industria y Comercio, a cargo de José Rossetto.
Bellone consideró que este segmento productivo “tiene muy pocos años en lo que hace a la elaboración de varietales finos y también muy poca experiencia en lo que hace a los procedimientos que tienen las bodegas a la hora de elaborar vinos”, por lo que a través del programa, se busca “enseñar cómo llevar adelante todo un proceso de elaboración de vinos que hacen a la calidad y a la seguridad alimentaria”. Asimismo, ponderó la articulación entre el Ministerio, el Inti y Coviar “para el desarrollo de la vitivinicultura jujeña”.
Por su parte, Sergio Flores, responsable del sistema de gestión de calidad del Inti Mendoza, aseguró: “Hemos visto que las bodegas tienen muchas expectativas, lo que realmente es un gusto porque todos nos mostraron un plan de crecimiento en cuanto a sus instalaciones. Están muy dispuestos a avanzar con esto, más allá que sea una regulación obligatoria para ellos, porque quieren ser ordenados y posicionarse en el mercado”.
Agregó que los vitivinicultores jujeños cuentan con “un producto muy bueno, con la impronta de un producto elaborado de manera artesanal pero con la visión de ser una bodega a gran escala”.
En tanto, Antonio Toledo del Inti Jujuy, señaló que el programa se implementará a lo largo de un año. “Tenemos un plan de trabajo que va a constar de visitas mensuales y diferentes actividades, de manera que permitan que cada bodega mejore y ofrezca productos más seguros y estándares”, explicó el especialista.
Si bien refirió que cada vitivinicultor cuenta con sus propios objetivos, aseguró que “el común denominador es que todos quieren mejorar y progresar, y ahí es donde nosotros vemos la oportunidad de crecimiento de la producción”.
“Están muy interesados en posicionar el vino de Jujuy en el mercado turístico y otros ya están pensando a futuro, posicionarlo en mercados internacionales. La calidad la tienen pero hay cosas que mejorar y para eso vamos a trabajar”, finalizó.