Además, se llevó a cabo la restauración de la puerta principal, implementando un sistema de estratificación de color para recuperar la tonalidad original de la madera; al tratarse de un bien declarado patrimonial, fue necesario remover múltiples capas de pintura sintética aplicadas durante años y, una vez limpia, se realizó un tratamiento de conservación y su posterior repintado respetando su estado original.
En este marco, también se renovó el cerco perimetral y las rejas, además de realizar reparaciones en las molduras exteriores y reforzar las estructuras de seguridad para la protección del templo.
Para la recuperación del color original de la iglesia, se llevaron a cabo estudios de cateo que permitieron determinar su tonalidad original, en la misma búsqueda de conservar su identidad histórica.
Asimismo, se instaló un sistema de redes especiales para evitar la nidificación de palomas y preservar la fachada del edificio. Las tareas de pintura y mantenimiento general se realizaron en toda la parte exterior, consolidando la puesta en valor de este emblemático patrimonio cultural de la provincia.
Las tareas en la iglesia Santa Bárbara seguirán avanzando mientras las condiciones climáticas lo permitan, y se espera una pronta finalización.
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