En este escenario, la gestión que encabeza Gerardo Morales, instrumentó instancias de capacitación direccionadas a técnicos y productores nucleados en clústeres, además de adquirir al mejor precio de mercado la producción de este alimento milenario de la zona andina, lo que representa un aporte de inconmensurable valor para la Quebrada y Puna.
El primer mandatario, señaló que “la producción de la quinua es un objetivo dentro de varios temas centrales que tenemos y me alegro que podamos fortalecer la productividad con maquinarias tanto para productores de la Quebrada y Yavi”.
Asimismo, comentó que en la zona de Pirquitas existe otra producción de quinua importante y con la asistencia de la UCAR se podrá seguir apostando a distintos proyectos de envergadura en todo el territorio.
“Hay nuevos productores que están sembrando quinua por primera vez entre 900 kilos por hectárea y todo esto sirve para fortalecer la producción. También hemos incorporado la quinua en el plan alimentario, en los comedores escolares y vamos a ajustar esto para que la quinua se posicione más”, finalizó Morales.
En su oportunidad, Gennari expresó que “hay un mandato político del presidente de apoyar esta producción porque la gente lo necesita y agradecemos a la gente que trabajó en este proyecto que brinda una oportunidad para que los productores de quinua trabajen en la zona y sigan produciendo con calidad”.
Por su parte, el ministro de producción mencionó que dichas maquinarias “darán un impulso a la producción de quinua y la posibilidad de expandir este súper cereal que ya tiene mucha demanda”, agregó también que la intención es fortalecer la producción y que pronto se aspire a producir 4 mil kilos de quinua.
Finalmente, Abud Robles resaltó la articulación entre el sector público y privado con el fin de ampliar la fuente de trabajo mediante el sector metalmecánico de Palpalá, en la fabricación de las maquinarias.
Este sistema fue diseñado íntegramente por el equipo técnico del IPAF NOA. Fue tomando varios prototipos y pruebas mediante las sugerencias de los productores y hoy es fabricado por la firma Flama SRL, empresa referente del sector metalmecánico jujeño.
En tal sentido, Eduardo Orcasitas, diseñador industrial del IPAF NOA, mencionó que “estamos entregando 8 sistemas modulares de poscosecha que es una tarea que demanda mucho esfuerzo a los productores y el objetivo es que puedan producir en mayor cantidad”.
Por último, el productor Anacleto Lamas, de la comunidad aborigen de Azul Pampa, mencionó que es costoso producir quinua, pero con esta tecnología se acortan los tiempos de la producción y mejoran la calidad también de su proceso.
“Las maquinas podrán clasificar en dos granos tanto en grandes y chicos. Ahora esperamos producir más y que la demanda crezca también y si la gente conociera los nutrientes que tiene la quinua mejoraría su alimentación diaria”, puntualizó.
